jueves, 5 de agosto de 2010

Es obvio que no hay nada más destructivo que la impunidad



“No hay nada más destructivo que la impunidad" ha manifestado Maite Pagazaurtundua, la hermana del que fuera jefe de la policía local de Andoain, víctima mortal de un atentado de ETA. Y tiene razón.

Los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) decían combatir a ETA, pero también atentaron contra militantes de la izquierda independentista vasca y grupos ecologistas. Realizaron atentados indiscriminados a consecuencia de los cuales fallecieron ciudadanos franceses sin afiliación política. Fueron responsables de 23 asesinatos y un secuestro (conocido)

Máximos implicados:

José Barrionuevo, ex ministro del Interior con Felipe González. Condenado a 10 años de prisión y 12 de inhabilitación por el secuestro de Segundo Marey y malversación de fondos públicos. Recibió un indulto parcial y obtuvo un tercer grado especial. Pasó solo tres meses en prisión.

Rafael Vera, Secretario de Estado de Seguridad con Felipe González. Condenado a 17 años de prisión y 12 de inhabilitación por el secuestro de Segundo Marey, malversación de fondos públicos y corrupción. Indultado parcialmente por Aznar. Cumplió dos años y dos meses de prisión, la mayor parte de ellos en régimen abierto situación en la que, creemos, aún continúa.

Enrique Rodríguez Galindo, ex-general de la Guardia Civil. Condenado a 71 años de prisión por el secuestro y asesinato de Lasa y Zabala. Cumplió tan sólo cuatro años y medio de prisión, siendo excarcelado por razones de salud.

Julen Elgorriaga, ex delegado del Gobierno en el País Vasco con Felipe González. Condenado en el mismo caso que Rodríguez Galindo, a 75 años. Cumplió sólo un año y nueve meses de cárcel, también fue excarcelado por motivos de salud.

José Amedo, ex–policía. Condenado a 117 años de prisión por seis delitos de asesinato, secuestro, lesiones y asociación ilícita. Pasó doce años en prisión, la mitad de ellos en régimen abierto.

Señor X. Responsable máximo de los GAL. Jamás ha pisado la cárcel.

Ninguno de los citados mostró nunca síntomas de arrepentimiento por su fechorías; sin embargo no sufrieron la “doctrina Parot”

Evidentemente, no hay nada peor que la impunidad.


Extraído de http://jmalvarezblog.blogspot.com/

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